Iván García Medina
Bonito alcaldete le agenció Movimiento Ciudadano a los zapopanos. El voraz inquilino de la alcaldía de Zapopan Pablo Lemus Navarro llegó a lo suyo, y lo suyo, lo suyo, es lucrar con dinero ajeno. Eso ha hecho toda su vida, robar, estafar, vociferar, acusar, está lleno de denuncias penales, la Auditoría Superior del Estado de Jalisco le halló en solo 3 meses de gobierno -de octubre a diciembre del 2015, en que entró- un desfalco de mil 200 millones de pesos y ahora dice que el municipio requiere un edificio de 500 millones de pesos. Como no tiene para pagarlos porque no ingresa los impuestos a las arcas -se entiende que se los lleva él porque buena gente no es- entonces quiere vender los mejores predios del patrimonio de Zapopan y así pagarle a sus amigos una obra faraónica de 500 millones de pesos que si llevara diezmo se atragantará con 50 millones de pesos para él pero como casi siempre es el 20 por ciento, se llevaría 100 millones más.
Hoy viernes 23 de junio, solamente el diario Milenio da cuenta del atraco que hará el más corrupto alcalde que haya tenido Zapopan, Pablo Lemus. Lo hace en viernes para que mañana sábado y el domingo nadie se entere de repercusiones si las hay.
La columna La Tremenda Corte dibuja así el bestial abuso de poder, bestial despojo a los zapopanos, es como si usted se casa con una viuda rica, y tras acabarse el dinero heredado, se le ocurre vender los mejores terrenos de la familia, al cabo que a usted ni le duele porque se va pronto de esa casa y el engaño a la viuda ha sido su modus vivendi: ‘Zapopan real estate’
“Si usted pasa hoy por el Ayuntamiento de Zapopan y ve banderines de colores desde postes próximos hacia la Presidencia Municipal, no se espante, será solamente que dentro los regidores se pondrán en modo inmobiliario (sic) para aprobar la venta de siete predios de propiedad municipal, con los que pretenden financiar el llamado Parque Zapopan Central en el terreno que actualmente ocupan las viejas instalaciones de Obras Públicas, Bomberos y la Policía, justo enfrente de La Curva. Lo singular de esta pretensión municipal es que, si todo sale como lo planea el alcalde Pablo Lemus, se pondrán en venta poco más de 446 mil metros cuadrados para edificar en un terreno de 47 mil metros cuadrados, es decir, en el equivalente a apenas un 10 por ciento de lo que se ofertará. Y entre esos 446 mil metros cuadrados hay predios que son una verdadera joya (sic) en el mercado inmobiliario, como el ubicado en Periférico norte, donde opera la planta de transferencia de basura, o el que está en el desarrollo de súper lujo Las Lomas (en la zona de Periférico poniente y 5 de Mayo), que se cotizan en millones de dólares. Ya veremos en qué beneficios resulta este proyecto para los habitantes de Zapopan”.
Ninguno, ningún beneficio habrá para Zapopan. Nadie en su sano juicio, ni Juan Sánchez Aldana ex alcalde ladrón de Zapopan intentó vender un centímetro de tierra de los zapopanos. Lemus no tiene llenadera, pero lo que sí tiene son socios, compinches, lo protegen todos.
Ahí les va la lista de sus protectores:el primero, el primero, el primerito, diputado local por ese municipio es el joven bribón Pedro Kumamoto que no ha dicho ni pío de todas las carranceadas de Pablo Lemus. Kumamoto se hace el loco con su ley absurda pro narcos y pro ladrones de quitar prerrogativas a partidos para que los ricos -a la buena y a la mala, pero más a la mala que a la buena- paguen las campañas. El, Pedro Kumamoto es el primer cómplice de Pablo Lemus. Si Kumamoto hablara ya se habría parado esa venta.
Aristóteles Sandoval es el segundo. El gobernador ha detenido a todo el PRI para que nadie hable de la monstruosa lista de cargos que la Auditoría le hizo a Pablo Lemus por “perdonar” impuestos a desarrolladores inmobiliarios, impuestos que andie se atrevió a exentar antes. Lemus, socio de los promotores del terreno Kodak le perdonó el pago de impuestos a sus amigos y así hasta perdonar mil doscientos millones de pesos.
Toooooodos los regidores del PRI, PAN, Morena y MC de Zapopan son cómplices. Nadie ha vendido terrenos del patrimonio municipal jamás y menos en esa cantidad que quiere Lemus ¡para construir una obra faraónica que le dejará 20 por ciento de utilidades al que asigne las obras!.
Y faltan más cómplices.
El abuso tiene fin.
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