El Grupo de la Universidad de Guadalajara entregó este sábado-domingo a su hijo putativo el corruptazo integrante del Comité de Participación Social del Sistema Anticorrupción -insólito, un corrupto defiende” el combate a la corrupción- David Gómez Álvarez, sobre quien pesa un cúmulo de denuncias con pruebas documentales y quizá testimoniales. El sábado 5 la institución universitaria ordenó que el domingo 6 se publicara un desplegado en el que “apoya” al aún integrante del CPS del SEA por lo cual queda claro que ¡hay conflicto de interés! Porque David y otros dos miembros de ese órgano, son empleados de la UdeG que deben vigilar.
Con eso, queda probada la liga entre UdeG y el cobrador de igualas y múltiples salarios, el dadivoso entregador de contratos del gobierno a sus socios, como está acusado.
Pues anda tan apanicado el tal David, que ya le fue a rogar a Raúl Padilla que lo respalde públicamente y eso será la mayor prueba de su liga con una institución que gasta dinero público.
Y ayer, tan apanicado anda el tal David, que como Sadam Hussein dijo que ganaría esta batalla al Goliath, que ayer trascendió que la Presidenta del Comité de Participación Social Lucía Almaraz orquestó una reunión -encerrona- con la presencia de Gómez Álvarez para presionar a otros integrantes del Sistema Anticorrupción para que se sumaran y enfrentaran juntos a los diputados del Congreso de Jalisco.
No se sabe bien a bien qué respondieron, lo que sí se sabe es que fue clara la molestia de Lucía Almaraz y desde luego de David Gómez Álvarez que salieron de la reunión muy enojados.
El caso es que se agota el tiempo y el corruptazo David Gómez Álvarez no piensa renunciar. Él, como su amigo Pablo Lemus, prefiere que le quiten el cargo a atender la ley.
Y -cantadita- se los va a cargar ya saben quién. Se los van a bailaaaaaarrr. Hoy o mañana.