Todavía no ha iniciado el período de campañas y según las empresas encuestadoras como Massive Caller, el candidato de Morena a la presidencia de Zapopan, Alberto Uribe ya tiene dos logros: alcanzó a Juan José Frangie que se cae a pedazos, y hace mucho que no solo frenó a Pedro Kumamoto, sino que ya lo hizo retroceder. En Zapopan, Tonalá y Tlaquepaque, los jaliscienses podemos ir pensando en que los equilibrios empiezan a existir.
Ayer se dio a conocer el estudio de Massive Caller del 30 de marzo y ahí Juan José Frangie, candidato de MC, sin más proyecto que continuar lo hecho por Pablo Lemus, aunque también sin carisma y sin equipo, ya pasó de 23.9 por ciento a 24.6 pero si estaba en empate técnico a solo 2.9 puntos de Alberto Uribe hoy ya solo tiene 24.6 por ciento de preferencias contra 24 de Uribe. Y Pedro Kumamoto, que tenía un tercer lugar con un 15.5% de aceptación, hoy ya está en 14.2, ocho décimas debajo de lo que había alcanzado.
Dos calificaciones bajando, la de Frangie y Kumamoto, y la de Uribe subiendo sólo tiene un significado: que la sociedad ha empezado a manifestar su decisión.
Los atributos electorales que yo veo en Alberto Uribe son solidez en su formación, modernidad en su discurso, y frescura en sus ideas.
Ha trascendido, por otra parte, que grupos empresariales y políticos ya están pensando seriamente en respaldar esta candidatura de Uribe porque no se quieren quedar fuera del proyecto político, ya que para sus inversiones no hay nada mejor que contar con la mejor ciudad del país como plantea Uribe.
A los electores ya nos conviene escucharlos, y el más beneficiado con ello sería Uribe, quien ha procesado bien su triunfo, presenta una planilla equilibrada que ya está haciendo su parte, y ha ofrecido llevar a gente con capacidad a la administración pública.
Zapopan ya es para Morena.
Al tiempo.
