A Fondo Jalisco
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Coyuntura La Aldea

Estado de Derecho

Rubén Ortega Montes*

“La ley es el medio, la Justicia es el fin”

La etapa llamada Neo Liberal trajo consigo sin duda nuevos modelos de libertad en el comercio entre ellos los ilícitos, el narcotráfico, la trata de blancas, el lavado de dinero que se consigue por la vía de las acciones ilícitas, trataré en este espacio de reflexión que me brinda amablemente Expedientes a Fondo de concatenar estos fenómenos criminales con la economía, con el lucro y las ganancias fin último al parecer de quienes dirigen las organizaciones criminales, aunque conocemos mas del lado oscuro del brazo armado, de quienes ejercen la violencia para someter a la sociedad, manejada desde una perspectiva en la que el fin ultimo es el capital, el dinero pues, como decimos acá.

 

México registra oficialmente más de 75 mil desaparecidos, de ellos son 10,248 se familias victimas en nuestro estado de Jalisco, donde llevamos uno de los tres primeros lugares del país, esto indica que de cada 100 denuncias de desaparecidos, entre levantados, y quienes salen y nunca regresan 14 ocurren en el Jalisco del:  ¡ Vamos bien, deja te cuento!…..

 

Día a día se suman mas números, y la capacidad de asombro se va diluyendo, vecinos, amigas, amigos, parientes, desconocidos que aparecen en las redes, incluso una rotonda se ha convertido ene l símbolo de la inacción, incapacidad de respuesta, ineptitud, insensibilidad que raya en el dejar ver y dejar pasar, que trae consigo la responsabilidad por omisión en el fenómeno criminógeno, aunado a los actos de desapariciones forzadas, como ocurrieron en la pasadas manifestaciones por la muerte de Giovany, en manos de policías de Ixtlahuacán de los Membrillos.

Una fuente oficial como el Registro de Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas en Jalisco se reportan 10,248 casos. El Sistema de Información de Víctimas de Desaparición registra 9,439 personas de no localizados en el Estado. Por lo que no existe gran diferencia entre ambas fuentes de consulta.

En el Jalisco del vamos bien, en los últimos 20 años se registran desaparecidos un 300 % mas de los reportados en el gobierno de Augusto Pinochet en Chile de 1973 a 1990 que según informes ronda en los 3,000; si el cotejo es con España entre 2010 y 2019, que según cifras rondan entre los 5,500 tenemos el 200% más y estamos hablando de Gobiernos en los que no existían los Derechos Humanos, como la Dictadura en Chile y España con fenómenos incluso separatista y con Terrorismo Urbano.

En agosto de 2017 en acatamiento a la Ley General de Desapariciones Forzadas y por Particulares, la creación del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas se creo la Fiscalía Especial en Búsqueda de Personas Desaparecidas en Jalisco, dentro de la Fiscalía General del Estado un Órgano especializado en el combate al fenómeno criminológico cometido fuerzas oficiales  o por particulares, sobre todo tratando de darle un sentido sensible al problema que casi al termino del Gobierno del Priista trataba de dar respuesta, envuelto en crisis de credibilidad por lo que después decantó en el caso de cadáveres acumulados sin seguir el protocolo en el llamado caso de los tráileres de la muerte, que trajo el rodamiento de cabezas de distintas dependencias gubernamentales, al detectarse que la sensibilidad humana no se llevaba de la mano de la función ministerial, forense, policiaca, esto sin mencionar la inacción del gobierno de Emilio González, que de la mano de bastantes municipios dejó crecer y abrió las puertas a estos tres fenómenos delincuenciales a que nos referimos.

Desafortunadamente para las familias que buscan a sus familiares desaparecidos en la última década, por citar a Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco conocida por sus siglas y acciones como FUNDEJ, así como el colectivo POR AMOR A ELLOS, que creyeron en las palabras de los Gobernantes en turno, pero que siguen en la búsqueda sin descanso de sus familiares, Fiscales van y vienen y los funcionarios cada día menos sensibles para su desgracia se acomodan y reacomodan, en la ineficaz Fiscalía de Solís Gómez, quien se ha convertido en mero Contador y vocero del número de Desaparecidos, numero de fosas, bolsas con restos humanos y cadáveres. Y poco pesa lo que se diga en la Comisión Estatal de Búsqueda, organismos que se van creando para ir esparciendo la responsabilidad del Estado de Procurar Justicia, en una falsa moda llamada Gobernanza.

La pregunta es: ¿a donde van los desaparecidos?,¿Será acaso a engrosar las filas del narcotráfico o su brazo armado?, ¿la jóvenes irán a los prostíbulos vía la trata de blancas?, todo ello pensando solo en las ganancias, los negocios, ¿el lavado de dinero? ¿Serviría de algo mayor inversión en tecnología y capacitación en video vigilancia, un Centro de Comando, Control, Computo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano C5 como el de la Ciudad de México, o incluso el de Zapopan, Jalisco, que permita que ante las sospechas de comisión del delito y levantones en tiempo real provocar reacción inmediata de las corporaciones policiales con respuesta positivas?. O ¿Tienen que aparecer los vigilantes justicieros que generan simpatía ya que los gobiernos no pueden tener un policía para cada ciudadano? . Y así concatenamos tres fenómenos criminológicos que con la falta de resultados se han convertido en factores criminógenas para que escalen día a día la comisión de los mismos gracias a la corrupción e impunidad del 95% que se registra en Jalisco, la tierra del Agave Azul, si esa la del Operativo de la Unidad de inteligencia Financiera.

Rubén Ortega Montes*   Es Profesor e Investigador de la U. de G., la UNEDL y

Miembro del Observatorio de Seguridad y Justicia de la U. de G.

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