Iván García Medina
El gobernador de Jalisco Enrique Alfaro nada trajo de la ciudad de México. Lo recibió sí, la secretaria de Gobernación Luisa María Alcalde pero de allá nada se trajo Alfaro, que ‘trae boleto’ de la 4T.
O sea, a Enrique Alfaro se las van a cobrar, porque es de los que cree que “llevándose bien” con el presidente lo es todo. Y casi. Pero aunque los secretarios le obedezcan ciegamente al presidente no lo pueden hacer con todo gusto.
El Informador dice en su columna Allá en la Fuente de hoy:“El mandatario estatal publicó en sus redes sociales, con foto de testimonio, que se reunió con la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde. Señaló que abordaron “distintos temas de la agenda de trabajo conjunta” de ambos gobiernos, federal y estatal. Y que confía “que en los próximos días (sic) podremos encontrar respuesta a los planteamientos que expusimos”.
“Cuando Luisa María Alcalde encabece a nivel nacional a Morena, lo cual está cantado, habrá que ver el discurso que tendrá con su nueva vestimenta (ésta sí planchada) a quien, con sus seguidores naranjas, pregonó en su sexenio “defender a Jalisco” (sic) de los morenos”.
Enrique Alfaro estaba acostumbrado a creer que engañaba al presidente y a los jaliscienses. Ahora deberá desacostumbrarse pues ya no será presidente Andrés Manuel López Obrador, sino Claudia Sheinbaum, según cómputo del Instituto Nacional Electoral (INE).
Y a remarle aunque parezca río arriba. Al menos esta vez el gobernador de Jalisco ya no se trajo nada de la Secretaría de Gobernación. Menos de la que seguramente será el relevo de Mario Delgado y con todo le ha peleado el resultado de las elecciones en Jalisco. Hasta en tribunales donde está ahora la elección.
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