Por Manuel Gutiérrez.
La maldita escuadra Primavera de Ferrari, reflejó los altos riesgos del deporte de la F-1 en su tiempo, en que los autos eran riesgosos, a los que sumaron adicionalmente la actitud de los pilotos. En su momento, la creó Enzo Ferrarri, porque en 1957 se le había ido a Maseratti el genial Juan Manuel Fangio y su misión para el Cavallino era conquistar el mundo.
Como si fuera un western, buscó a los más rápidos, que desenfundarían en un abrir y cerrar de ojos, y listo, Ferrari se llevaba el campeonato.
Eran los siete magníficos, la crema y nata de la velocidad: El Marques español, Don Alfonso de Portago, Eugenio Castelloti, italiano, el temperamental Luigi Musso, italianoel de mayor edad con 32, otro italiano Cesare Perdisa, el menos involucrado.
Más los “rubios” como serían conocidos Peter Collins, Mike Hawthron, el alemán Wolfgang Von Trips, otro barón de Alemania, y algunos suman a Jean Behra, que fue de los que menos tuvo que ver en la maldición, pero le alcanzó, y los siete murieron.
En aquellos años, mientras en Europa venía el invierno, se desplazaba la F-1 a la primavera Argentina, tal vez de ahí vino el nombre. Era una larga pretemporada y carreras, para luego volver a los escenarios europeos.
Los pilotos duraban 24 horas en el aire en un vuelo largo y cansado. Ellos eran hombres de valor, y para matar el tiempo, se enfrascaban en largas y osadas jugadas de poker, poniendo a las cartas sus fortunas. Los pilotos de entonces eran prototipos de la temeridad y no conocían la palabra prudencia, ni la sensates: Eran puro corazón, artistas de pasión, vivian el momento con toda intensidad.
Perdisa fue el mejor ganador en las cartas y Musso quedó endeudado hasta con dinero que todavía no ganaba; había perdido lo que aspiraba a ganar en un año. Mala idea combinar con la velocidad deudas de juego enormes.
Aquí viene otro factor importante: Los Italianos estaban inconsolables por la muerte de Alberto Ascari, en Monza en 1955 entonces, era motivo de búsqueda de restaurar al héroe nacional de las carreras ausente, los fanáticos querían una nueva figura.
Esto aceleró el temperamento italiano y creó una competitividad adicional, además eran piezas del ajedrez de Enzo Ferrari, que jugó una gran partida de poder con ellos.Si ganó, pero a que costo.
La rivalidad entre Musso y Perdisa ocasionó que el primero se vengara en las carreras, ya que le cedió el volante del Lancia-Ferrari D50 a Juan Manuel Fangio, compartiendo puntos. En aquellos tiempos la voluntad de los pilotos era ley les valían los patrocinadores, los dueños de equipos y todo eran los reyes.
Perdisa se sintió marginado y acabó saliendo de Ferrari y se fue a Maserati su carrera fue corta de 8 grandes premios, no alcanzó la maldición y por ello algunos no lo nombran en la Escuadra Primavera y murió a los 65 años pero no en la pista.
La rivalidad creció entre los primaverales italianos restantes, colocándose Musso y Castelloti en cerrado duelo. Por su parte los británicos Collins-Hawthorn, hicieron un equipo propio dentro de Ferrari, duelo de rubios.
Castelloti fue el primero en morir en pruebas en Modena, Enzo le ordenó batir el récord de Maserati en preparativos para Sebring en sport cars. La muerte se achacó a que el piloto hacia frecuentes desplazamientos para ver la actriz Delia Scala, en tórrido romance y por celos frecuentes, fatiga de los excesos de pasión.
Sin embargo Musso dudó y cuestionó los frenos de Ferrari, lo que armó una bronca en Maranello, exigió doble circuito de frenos para su auto, pero poner a Ferrari en el banquillo de los acusados, era demasiado en ese tiempo.
Como si no bastara tanta pólvora, resulta que los pilotos de esos años corrían por el dinero de los Grandes Premios, por lo que las bolsas eran un incentivo de competencia adicional. Su forma de vida extravagante demandaba que ganaran a como diera lugar.
Los ingleses de Ferrari, cobraban en moneda extranjera, y Musso exigió un trato igual. La disputa paso a la pista acentuándose en duelos personales entre Hawthorn y Mussoque se volcó en la contienda aunque no se habló de maniobra antideportiva.
Musso para su suerte terminó en tercer lugar del campeonato, detrás de Stirling Moss y Juan Manuel Fangio, su mejor desempeño en los récords. Debía correr la MilleMiglia, celebre carrera de mil kilómetros por carreteras de Italia. Pero enfermó y su sitio lo tomó el noble español Portago, (andaba con Dorian Leight, una famosa de ese tiempo en forma extra-marital), que sufrió terrible accidentey murió su copiloto Edmund Nelson, y diez espectadores, poniendo fin a una carrera mítica la Milla Miglia que fue prohibida.
Sin embargo la conquista del mundo estaba pendiente. Musso desdeñó una oferta británica de BRM y volvió a firmar con Ferrari pero con los ingleses Collins y Hawthroncomo compañeros.
Sin embargo aunque Ferrari pasaba por un buen momento en ventas de sus coches de calle, Enzo descubrió que la esposa de Collins, Louise King, era hija de un directivo de Chrysler, Ferrari que salía de un estado de emergencia, estabasocorrido entonces por FIAT, por ACI (club del automóvil de Italia) que agenciaron 300 millones de liras y por razones comerciales y trato personal, Collins era un favorito de Enzo que aprovechó la oportunidad para salvar su fábrica.
Enzo se inclinó por los británicos que obtuvieron el derecho de exclusividad en carreras sport que tenían grandes bolsas. Incluso llevaron su representante exclusivo de equipo, un Coronel Ronnie Hoare.
Esto llevó al año 1958 pero el sueño de dominio de la escuadra primavera se hundía. Los Cooper Climax anticipan los frenos de disco y son superiores, sin que nadie en Ferrari pudiera con ellos. Musso estalla y tenía una relación con una joven, Fiamma Breschi y habla de una conspiración probritánica en Ferrari, un escándalo de lujo para el orgullo nacional italiano.
Musso pide entonces correr en Sport con Von Trips, para “Hacer el eje Roma-Berlín contra los británicos” casi revive la segunda guerra mundial esto se reflejaba hasta en las tribunas.
Explicó que como los corredores ingleses estaban asociados entonces los premios se los repartían. Con Von Trips la victoria estaba asegurada para las máquinas rojas (Y el dinero).
El ambiente se volvió de locos. La maldición estaba por llegar. Musso recibe anónimos de que su carro está alterado y esto llega a un periodista. En los Mil Kilómetros de Argentina, Collins lo supera al perder el auto Musso por rotura de…la dirección. La sospecha, la desconfianza y el mal ambiente reinan.
Para 1958 en el Gran Premio de Francia, Musso pone las esperanzas en ganar la bolsa, 10 millones de liras, cedida por fabricantes de champagne y se corre en Reims. Los pilotos amaban este premio junto al de Mónaco, porque se daban gran vida, comida y bebida y emociones entre ellas el juego, y Musso apostó fuerte en una partida y se dice que debía dinero a la mafia y hubo bromas muy pesadas entre ellos.
Fangio actuó a favor de Musso y le recomendó tomar la curva “calvario” a fondo. El campeonato estaba en juego Musso a 3 puntos del líder Moss, pero seguía Hawthorn, pero Musso comenzó su vuelo al perder el control en la curva…precedido por Hawthorn, que se especula disminuyó ligeramente y así descontroló a Musso…el accidente nunca quedó claro.
La esposa de Musso, Fiamma Breschi, enterada de las especulaciones los vió a los ingleses contentos jugando cartas y los maldijo: “En las próximas carreras alguien pagará” aunque Enzo la contrató para las relaciones de la firma, fue profética.
Peter Collins, era muy querido por Enzo, se mató posteriormente en Nurburgring dos carreras después de la muerte de Musso. Enzo tomó la protección de Fiamma a la que le puso una prestigiada florería de lujo, pero luego se enamoró de ella.
Mike Hawthorn muy dolido, logró el campeonato mundial yse retiró. Lo nombraron “caballero del deporte” estrelló su Jaguar privado a 230kmh con un árbol. Se le detectó en forma póstuma, un deterioro renal que era de pronóstico mortal así que se pudo pensar en que prefirió morir en la velocidad.
Jean Behra, también murió en un accidente. Fue expulsado por golpear un directivo de Ferrari. Von Trips, otro noble y grande en la Escuadra Original, murió en Monza, salió volando del auto, conduciendo para Ferrari, en un percanceen que mató a 14 espectadores, su auto voló y cayó en una tribuna repleta. Monza siguió hasta nuestros días.
Von Trips declaró sobre el riesgo de chocar al New York Times, que calificó la F-1 como “cruel deporte” dijo: “ Algopuede suceder mañana, (Morir) es parte del negocio. Tu nunca sabes”.
Todos, todos, los de la Escuadra Primavera, tuvieron esplendidas aventuras, héroes románticos, que también influyó su forma de competir, en su actitud personal, su forma de jugarse la vida.
Sólo James Hunt o Gilles Villeneuve, o Didier Pironi, y Mansell, serían capaces de verse en ese espejo. Pasión, no cerebro.
Pero Enzo fue más fuerte, “No te encariñes con los pilotos, -le dijo a su querido hijo Dino– nunca se sabe cuándo van a morir” y Ferrari siguió, Enzo mandó destruir los bólidos de la Escuadra Primavera, por la maldición. Hoy valdrían una fortuna cada uno de ellos.
No serían las últimas tragedias, por eso es tan grande el cavallino rampante, es rojo sangre, temeridad, nunca dejaron las carreras ni las dejarán, solo que muera la F-1.
Los pilotos de la Escuadra Primavera era leyendas vivientes, sólo comparables a los toreros famosos, novios de la muerte, por eso se les amaba tanto, descubrirlos es deslumbrante y hace ver descafeinada a la F-1 actual.
Fuentes: NYT 3 septiembre 2015. Auto Racing is still Cruel after all these years– Car and Driver: Misterios de la muerte de Luigi Musso. 9/7/2007, Tomás Carreto. Twitter. La Escuadra Primavera. Un experto enorme en el tema, coleccionista documental. Esta es una gran historia de la F-1.
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