Iván García Medina
En medio de un inexplicable silencio de la oposición a Movimiento Ciudadano (MC), o sea PRI -con todos sus dirigentes, sicarios virtuales, bots, trolls, etcétera-; silencio del PAN; silencio del propio MC, los habitantes de Zapopan fueron robados hoy y durante 18 largos años más, para que una empresa fantasma a la que el voraz presidente municipal -revelado como gran delincuente de cuello blanco-, Pablo Latrocinio Lemus, le fabricó una licitación a modo, una sociedad anónima a modo y le dio a ganar 4 mil 380 millones de pesos descaradamente, según documentó hoy cabalmente el diario Mural en su portada principal.
La nota que está encabezada como “Y aquí los ganadores del alumbrado de Zapopan” es devastadora para Movimiento Ciudadano, partido que buscó, propuso y arropó como hombre honesto para servir a los zapopanos, también lo es para el proyecto Enrique Alfaro Ramírez, quien no podrá presentarse a campaña cuando le pregunten por todas las fotos en las que acompaña a Pablo Lemus y ríe con él.
Dice la nota: “Sólo escombros (sic) hay en el domicilio anotado en la escritura de Power Iluminare, una de las tres empresas que ganó el contrato multimillonario de concesión del alumbrado público de Zapopan.
“El Ayuntamiento mostró ese documento notarial como prueba de que Power Iluminare está legalmente constituida (sic), después (sic) de que MURAL señaló que dicha firma tenía menos de un año de creación y había registrado ante el Registro Público del Comercio su domicilio como “Zona Metropolitana de la Ciudad de Guadalajara”.
“De acuerdo con la Escritura 960 del Notario Público 49, que dio como prueba el Gobierno Municipal, Power Iluminare estableció su domicilio fiscal en el 77 de la Calle Mariano Azuela, en la Colonia Ladrón de Guevara, de Guadalajara.
MURAL acudió (sic) a esa dirección y se encontró que la finca fue demolida (sic).
“Incluso, el 77-B también luce abandonado (sic), sin letreros y con más de una semana que no registra actividad, de acuerdo con testimonios de vecinos”.
Lo más extraño para los especialistas es que en vísperas de licitar el alumbrado “alguien” pactó con Fortius Electromecánica constituir una SA a partes iguales (ajá, pensó usted mal, luego entonces pensó bien) que a partir de ahí se repartirían a partes iguales los contratos que ganaran.
Y tan, tan.
El 30 de enero del 2017, Mural y los concursantes ya sabían que la entonces recién difundida convocatoria –amañada y publicada en la gaceta municipal, no en diarios ni en la web- beneficiaría a Fortius. Y así fue.
La nota de Mural ese día decía: “El concurso por el contrato que otorgará el Municipio, por 18 años y 20.3 millones de pesos mensuales, se cerró entre quejas (sic) por deficiencias en la convocatoria.
“Se limita seriamente la participación (sic) de las concursantes y favorecen a unas”, reclamó una empresa durante la junta de aclaraciones.
“Entre las condiciones del Ayuntamiento está que las firmas cuenten con opinión favorable de la Comisión Nacional de Uso Eficiente de Energía (Conuee), algo que sólo 19 propuestas han logrado en el País desde 2008, entre ellas una de las participantes (sic): Fortius Electromecánica.
“Otra limitante que superó la firma citada es haber recibido apoyo del Fondo para la
Transición Energética y Aprovechamiento Sustentable de la Energía (Fotease).
“Además, cumple con la experiencia de haber instalado 5 mil kilómetros de cableado eléctrico en un solo contrato -superior a la frontera entre México y EU-, lo que generó protestas, pues algunas sí cumplían, pero en diferentes proyectos, lo cual no sería (sic) tomado en cuenta.
“Ante lo anterior, algunos inconformes acusaron que se estaría favoreciendo a Fortius”.
¿Así o más claro el robo a los bolsillos y confianza de los zapopanos?
(La foto de Jonathan Compton que publicó el diario Mural es elocuente)
