Gran escandalera en Zapopan provocó hoy la firma de encuestas Massive Caller, al cerrar la contienda electoral en Guadalajara, pero abrirla en Zapopan y dar un más amplio margen de maniobra al candidato de Morena, Alberto Uribe Camacho, quien ya tiene hoy 23.8% de aceptación, 3 puntos y medio arriba del candidato del partido oficial Juan José Frangie y el del Grupo Iteso Pedro Kumamoto, quien solo tiene un 18.7 por ciento, 5 puntos y una décima debajo de Uribe.
La verdad es que la comunicación de Frangie tiene una concepción muy pobre pero estilizada, y su operación política choca con la dura realidad. Ni hay quien quiera salir por calcomanías ni hay quien quiera ir a sus mítines. Digamos que Frangie nació sin estrella.
Y Pedro Kumamoto forjó un discurso más propio para el Poder Legislativo, pero le costó mucho el haberse ido dos años a estudiar a Reino Unido un postgrado, tiempo en el que se desconectó de la gente que tenía en el distrito X.
Esto apenas va empezando, no vamos ni a una semana del inicio de tareas de campaña y ya se despegó lo suficiente Uribe para advertir como en el beisbol cuando un jugador pegaba un batazo sólido, sólido, alto, alto, y el cronista no quería cantar antes el jonrón pero éste ya estaba en marcha: “se va… se va…se fue…”.
