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Gabriel Torres Espinoza

Venezuela, ¿por qué?

Análisis

La problematización político-económico de Venezuela es más compleja de lo que parece. El Democracy Ranking 2018, elaborado por The Economist Intelligence Unit, señala que Venezuela es un paíautoritario. En dicho índice, el país de Simón Bolívar ocupa el lugar 135, de entre 167 naciones evaluadas en materia de democracia. Por otro lado, en este año, se prevé que la dramática hiperinflación de Venezuela llegue a 10,000,000%. Para efectos comparativos, en 2017, la inflación promedio a nivel mundial fue de apenas 2.1%. La recesión de Venezuela es igualmente alarmante. El Banco Mundial (BM) pronostica que el PIB de Venezuela se va a contraer en este año un 25% adicional, pese a que la caída en 2018 batió récords, con un 17,7%. El BM señala que se trata de la peor crisis en la Historia moderna de la región

En el continente americano, Venezuela es el epicentro de una frenética disputa de las dos únicas superpotencias diplomáticas y militares del Orbe: Estados Unidos (E.E.U.U.) y Rusia. Bien podría decirse que, bajo la debida proporción guardada, Venezuela es en América, lo que Siria es en Medio Oriente: comparten un régimen dictatorial, con dos fuerzas políticas polarizadas en disputa una apoyada por los norteamericanos, y otra por los rusos. Una eventual y nada improbable guerra civil en Venezuela aportaría mayores elementos de juicio para este símil. 

El problema económico de Venezuela derivó de un problema geopolítico, y no precisamente de una errada política económica. Me explico. La inusitada hiperinflación y recesión del país latinoamericano se debe al bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por E.E.U.U. Las sanciones económicas impuestas a Venezuela no las resistiría nadie. En alguna ocasión, el ex presidente ecuatoriano Rafael Correa, PhD en Economía, con 18 doctorados honoris causa, señalóun bloqueo económico como el de Cuba, impuesto a Ecuador, no lo aguantaríamos un fin de semana. Se trata de una estrategia que E.E.U.U. aprendieron a utilizar en el transcurso de la Guerra Fría, y que tuvo como antecedente primigenio el bloqueo y embargo económico a Cuba. Recientemente, E.E.U.U. no doblegó a Corea del Norte con una intervención militar, o una guerra, sino con una innumerable lista de sanciones económicas. Esa es la herramienta coercitiva por antonomasia del siglo XXI. 

No es casualidad que Venezuela sea el país con las mayores reservas de petróleo en el Mundo; además de ser el segundo con mayores reservas de oro y el octavo con mayores reservas de gas natural. Tampoco es una casualidad la estrepitosa caída de los precios del petróleo, que quebrantóla principal y casi única fuente de divisas de Venezuela.Estados Unidos aumentó su producción inusitadamente [por primera vez, desde 1973, es el principal productor de petróleo a nivel mundial], junto con su principal aliado Arabia Saudita [2do principal productor de crudo]; y bloqueó la comercialización de petróleo para Irán y Venezuela [importantes productores de crudo]: con ello, aumentó la oferta, y disminuyeron los precios. Más aún, debe tenerse en cuenta que las principales calificadoras crediticias del Mundo [Moodys, Goldman Sachs y Standard & Poors] son norteamericanas y tienen sede en Nueva York: estas tienen la capacidad para aumentar estratosféricamente las tasas de interés para la deuda de un país y negar el acceso a financiamiento. Ellas sirven a los intereses de E.E.U.U. En términos económicos, el financiamiento es, en buena medida, la clave para salir del subdesarrollo [los países más endeudados del Globo, con relación a su PIB, son los más desarrollados]. Esto explica el milagro económico de los cuatro tigres asiáticos [Corea del Sur; Hong Kong, Singapur, Taiwán], auspiciado por el contexto sociopolítico y el exagerado apoyo financiero de los E.E.U.U. hacia estos países, en una clara lucha ideológica en contra del socialismo/comunismo: Corea del Sur vs Corea del Norte; Hong Kong vs China; Singapur vs Malasia/Indonesia; y Taiwán vs China. 

La asfixia y persecución política a la oposición en Venezuela es totalmente condenable responsabilidad única de Maduro, pero su crisis económica tiene una explicación mucho más compleja de lo que hasta hoy se discute…

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