Terrible momento pasa la Iniciativa Privada de Jalisco: Los hermanos Medina Mora de la cual es miembro el talentoso José, presidente de Coparmex, perdieron fuerza en la cúpula nacional empresarial entre otras cosas porque no pueden hacer mucho contra el gobierno federal ya que les reviven las acusaciones ante la UIF que hicieron renunciar a Eduardo como ministro de la Corte. Manuel Herrera Vega, ex presidente de Concamín, vio llegar al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) a un hombre muy respetuoso con la 4T, a su adversario personal Francisco Cervantes Díaz y no pudo impedirlo. Cervantes ganó votación 5-2 -de los dos votos en contra, uno fue de la Coparmex-.
Así, con todo en contra, con pleitos estériles en la IP nacional, alejados de la 4T, del PRI, del PAN, los empresarios jaliscienses se fueron a Movimiento Ciudadano de Jalisco para crear un sector que no los llevará más que a ser una fuercita local o regional.
En la Cámara de Diputados los miran con mucha debilidad, porque ese sector empresarial que está en Movimiento Ciudadano, pierde todas las votaciones que les interesa aprobar pero éstas quedan sepultadas; los sientan hasta atrás en el pleno de la Cámara de Diputados; los diputados no les dan sitio en la Comisión Permanente -qué tristeza- y a su coordinador Jorge Álvarez Máynez, ni un lazo le tiran por grosero y mentiroso.
Ahí van juntos. Historia o pasado con historia o pasado. Van juntos estos empresarios y los políticos que son hijos -políticos- de Dante Delgado, histórico ya de la política nacional; empresarios que son pasado, que en Jalisco apantallan a muchos, pero no a todos. El caso es que perdieron posiciones, y estos empresarios de Jalisco casi casi son apestados en las cúpulas nacionales.
Otra vez será.