Por Arq. Jorge Eduardo García
¡Así las cosas! Resulta increíble la construcción de acuerdos que se hacen en la política, resulta aún más increíble ver como manotea Enrique Aubry de Castro al interior del PRI.
Valdría la pena recordar el año de 2011 y la elección de Eruviel Ávila para gobernador en el estado de México. Recuerdo bien a Ramiro Hernández García, Ana Esthela Durán, Joel González, José Refugio Velázquez, operar la elección desde el municipio de Cuautitlan, la elección para el PRI mexiquense, a decir verdad, Leonel Sandoval y Héctor Vielma también aparecían en dicha operación, pero tan sólo asistieron al evento, fueron inoperantes, fue en esos días del “nuevo PRI” donde Rafael González Pimienta cumplía el interinato, tras la destitución por parte del Guero Barba del “mata perros de Guizar”.
El PRI ya parecía una aplanadora inalcanzable, todo mundo se peinaba de copete y se ponía la chamarra roja del “peñismo”, ahí en el estado de México Ramiro Hernández negaba la aspiración por la capital del Estado, porque su sueño era ser gobernador y para eso impulsaba al “COCO” para presidente del CDE del PRI Jalisco. Del Coco se hablaban cosas buenas, incluso desprendió ahí su celebre frase que la política moderna requería candidatos inmaculados, en verdad emocionaba, era el espíritu de Reyes Heroles que se apoderaba del coquito y extasiaba a todos con ese espíritu puro, que no tenía posibilidad alguna de llegar a ser.
Obvio no sucedió, había aspirantes que tenían más cercanía con el entorno político nacional, el caso de Jorge López Portillo, en el estado presionaba Eduardo Almaguer Ramírez, siendo regidor de Guadalajara y de los afectos de la maestra Ayón impulsaron para que fuera él quién llevara a buen puerto los comicios priístas. Asi es, logró ser él quién llevara al triunfo y a la transición para ganar la gubernatura del estado.
Ramiro Hernández se decía que era el mejor amigo en política de Enrique Peña, pues Ramiro ya era viudo y dio consuelo al ex gobernador mexiquense y candidato al gobierno de la república, Hernández García era Senador por Jalisco y Manlio Fabio Beltrones Rivera era su compañero en el senado, incluso Manlio Fabio Beltrones mostró su simpatía en Jalisco en monumental evento en apoyo a Ramiro a la gobernatura de Jalisco.
Al final la designación de Ramiro se dio en una mesa, no fue hasta que la maestra Ayón aceptó ser regidora por Guadalajara, porque las candidatas eran Rocio Corona Nakamura y la Maestra, entregó en manos del dirigente nacional de la CNOP la candidatura y se dispuso a trabajar, mejor dicho, a bigotizar la ciudad, Ramiro fue gris desde la campaña, tenía enfrente a su gran amigo y socio Alberto Cárdenas Jiménez, y finalmente ganó la elección en 2012 en Guadalajara, El PRI de no ir en alianza con el Verde “ecologista” (sin registro de partido verde) no hubiera ganado la contienda constitucional, ahí se sella una gran “amistad” la de Aubry de Castro y Ramiro Hernández García.
Hoy me pregunto, si Ramiro después de haber recibido el apoyo incondicional de Beltrones y Enrique Peña, ¿no sentirá remordimiento de traicionarlos? Pues en todo momento se quejó amargamente que Aris le tenía el pie en el pescuezo y por tal motivo no pudo brillar, su gobierno al igual que él, fue gris.
Ahora no nos quiera salir Ramiro que será candidato a gobernador, tendrá mucho que explicar en el CEN del PRI.
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