Iván García Medina
El ex presidente municipal panista de Guadalajara Alfonso Petersen Farah, que del 2007 al 2009 encabezó una de las administaciones municipales más corruptas de la historia de esta capital jalisciense, fincó un perverso modelo de despojo al patrimonio municipal que ahora ha replicado en Zapopan, municipio que en mala hora preside, el voraz Pablo Lemus Navarro.
Ambos, Petersen Farah y Lemus Navarro, hacen el uno-dos en muchos asuntos o negocios.
El 14 de septiembre del 2015, el maestro Gabriel Torres Espinoza habló del negociazo de la era Petersen Farah en Guadalajara durante ese lastimoso trienio y ahora que Alfonso Petersen es regidor el asunto de despojo a la ciudad se ha afianzado. Leamos: “El negocio “al estilo Jalisco” nació el 19 de junio de 2008, cuando el Ayuntamiento de Guadalajara en sesión ordinaria aprobó el Decreto D 54/17/08, referente a la edificación del proyecto Puerta Guadalajara, hoy renombrado como Iconia. Cedieron así “la posesión material y jurídica” de 13.6 hectáreas al grupo español Mecano América, para la construcción de Puerta Guadalajara (ahora Iconia). “Guadalajara recibiría como contraprestación 688 millones de pesos en especie (calculado entonces en dólares), a través de diversas obras (sic), a más tardar en 2012. En una especie all inclusive, muy propio de esos oficiosos funcionarios que están al servicio de empresarios corruptos (sic), el Ayuntamiento de Guadalajara entregó a los desarrolladores todas las licencias y permisos de construcción para que se construyan 20 torres de departamentos, con alturas que van de los 25 (resic) hasta los 62 (sic) pisos. “Licencias y permisos que fueron calculados por El Colegio de Arquitectos y Urbanistas del Estado de Jalisco, en 600 millones de pesos (MILENIO; “Colegio de arquitectos cuestiona proyecto de desarrollo Iconia”; 26/11/2013). Es el caso que desde 2008, los “arriesgados” empresarios se han jineteado los 688 millones, cuando hoy el dólar se cotiza a poco más del doble”.
Bueno, Alfonso Petersen autorizó torres de 25 a 62 pisos -“usted escoja” les dijo a sus amigos-. Cambió terrenos por obras -mírelo al listillo- y ahora está pidiendo por oficio a Enrique Alfaro que investigue un edificio de 4 pisos y roof garden.
¡Ah! Pero ya viene una denuncia para él por haberse atascado en la presidencia de Guadalajara y en la regiduría, dañando, él sí, a los tapatíos.
Y el sí, deberá comparecer con toda y su prosapia en las agencias del MP con amparo y toda la cosa. (fuero ya no hay)
Por andar en los lodazales haciendo trabajo sucio.
¿Así o más sin vergüenza?
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