Como va:
De lamentarse el caso del PRI Jalisco, de su candidato a gobernador Miguel Castro Reynoso y de José Antonio Meade, por el abandono en que los tiene su Instituto político, que demuestra que ya se entregó y que solo meterá dinero a la compra de votos donde sí haya quién le venda. A las campañas perdedoras ya les cerró la llave.
Hoy jueves 7 de junio el Diario El Universal en la columna de Salvador García Soto revela también la crítica situación en que está José Antonio Meade, leamos: “Nunca fue una campaña en la que abundaran, precisamente los recursos económicos; pero en las últimas semanas, sobre todo a partir de que las encuestas lo confirmaron en tercer lugar y en el mejor de los casos con posibilidades de pelear el segundo lugar en la contienda presidencial, el proselitismo del candidato del PRI,José Antonio Meade, ha visto cómo se recortan cada vez más las fuentes de financiamiento tanto de dinero público, vía las administraciones de su partido, como los apoyos monetarios o en especie de empresarios que estaban apoyando la campaña, pero que han comenzado a retirar esos apoyos ante las faltas expectativas reales de triunfo del candidato”.
Ahí no para el derrumbe, también hoy jueves El Informador en su columna Allá en la Fuente dibuja bien el claro abandono a Miguel Castro en la visita del presidente del CEN del PRI a Jalisco, René Juárez Cisneros. Leamos: “Parece que Raúl Juárez Cisneros, líder nacional del PRI, no quiso, no pudo o simplemente se le olvidó que durante su visita a Guadalajara el anfitrión era Miguel Castro Reynoso, candidato del PRI al Gobierno de Jalisco.
“Lo decimos porque ante reiterados cuestionamientos sobre el escenario a nivel estatal, varias veces evadió responder para remarcar que José Antonio Meade era un gran candidato.
“Hasta que se le insistió reparó en que el ex titular de la Sedis era un “gran contendiente”.
“¿De plano los priistas perdieron el rumbo que ya ni entre ellos se reconocen?”.
Bueno, al buen entendedor, pocas palabras, adiós al PRI.
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