Por Manuel Gutiérrez
(Primera de dos partes)
Yukio Mishima, el gigante literario fue tres veces candidato al premio Nobel en letras. Doctor en Derecho, Constructor del Nacionalismo Japonés, paso a ser un testimonio vivo de sus Lecciones Espirituales para Samurais, dirigido a los jóvenes de todo el mundo.
Esa Lecciones están investidas en 5 textos. Advierten sobre la necesidad de los valores tradicionales, así como ser portadores de una ética valiente. Añaden la filosofía de la acción, y la codificación de la Sociedad del Escudo, en que privilegia elhonor, la belleza, la historia, y busca reencender la llama perdida del espíritu guerrero, inspira heroísmo, el convertirse en un campeón de la causa.
Pregunta en esas lecciones: ¿Quereís tanto la vida, como para sacrificar la existencia del Espíritu? Incluye una reflexión sobre sus últimos 25 años y una Proclamación, que llevo a realizar en la toma del edificio del Estado Mayor, en que sin armas se dirigió a la clase militar de Japón de postguerra, para animarlos a la restauración del valor Imperial y romper con la degradación del consumismo, del capitalismo que borraba la identidad histórica del Japón.
Para Yukio la vida occidentalizada -pese al éxito que tuvo en ella- era una forma enajenante de los impulsos individuales de grandeza, buscando un ideal superior en la vida. Para el, lo fue la figura del Emperador.
Los silbidos y la reprobación de sus ideas, por parte de los militares que no lo entendieron, lo hicieron enmarcar su proclama mediante una muerte de honor por el sepuku, luego de clavarse la katana en el vientre, para con sangre sustentar su proclama.
Yukio Mishima intentó reflejar la belleza de la “muerte heroica” digna de un Samurai, lo predicó y lo hizo. La impresión impidió que sus discípulos ejecutaran el golpe de remate que decapita, como está prescrito y recibió dos, esto fue el 25 de noviembre del 70.
El Samurai es un guerrero inmerso en conceptos que rigen su estilo, inspirados en mística oriental, una forma de caballería, inspirada en la obra “Oculto por las hojas” el Hagakure, una obra inspirada en el Bushido del siglo XVIII por Yamamoto Tsunetomo. La diferencia con la caballería occidental está en el enfoque religioso, aunque el Samurai también busca trascender en el más álla.
La elevada elegancia con que trabajó el lenguaje, ya que tuvo maestro al Nobel de Literatura, Yasunari Kawabata, otro obsesionado con la perfección estética, que buscó la suprema elegancia del lenguaje.
Kawabata se suicidó dos años después de la muerte de Mishima en 1972. Nunca entendió porque le negaron el Nobel a su talentoso y enorme discípulo.
Yukio admitió su homosexualidad, en una de sus exitosas obras “Confesiones de una Máscara” lo cual no era juzgado en ese tiempo como ahora en la sociedad occidental, por ello como a Oscar Wilde, los hubieran hecho íconos mundiales.
El teatro kabuki exige que los papeles femeninos, sean protagonizados por hombres. pero siendo un joven enfermizo, afeminado, decidió por el poder de la voluntad …cambiar, construir en el mismo, un cuerpo atlético mediante artes marciales, kendo, se convirtió en un guerrero.
Con la idea de hacer un cuerpo poderoso y estético y conjuntamente ingresó al cuerpo militar del Japón de la Postguerra, fue piloto de combate voló los Starfighter F-102 a reacción, tuvo temple y arrogancia ante la muerte como los caballeros occidentales. Se casó nada menos que la exnovia del Emperador y procreo dos hijos.
Hay una transición del romanticismo al nacionalismo como finalidad. Su vasta producción, de calidad a una hermosura extraordinaria identifica sus escritos.
Vino “El Pabellón de Oro” una fuerte crítica la falsedad de la moralidad religiosa (Budista) detalles como una vida de ascetismo de día, con furtivas salidas nocturnas a caros restaurantes y también a probar la carne humana, pese a los votos.
Con facilidad componía desde obras de teatro, ensayos, novelas, comenzó desde los once años, como “Después del Banquete” luego en 61 “El sabor de la gloria” y “Mi amigo Hitler” en 1968, Yukio lo desafiaba todo. Vino “El Sol y el acero” y “El marinero que cayó de la gracia del Mar”.
Sus ultimas cuatro obras llegaron a un nivel sorprendente, para la calidad que tuvo siempre. “Mar de la Fertilidad” despliega “Nieve de Primavera” luego “Caballos Desbocados” seguidos por “El templo de la Aurora” y “La corrupción de un ángel” como legado cercano a su muerte.
Llegó a fotografiarse desnudo solo con los símbolos imperiales y la espada, conmocionaba Japón y sus letras se arraigaban en el mundo occidental con singular éxito, Italia y España lo aplaudieron con delirio.
Tiene más de 40 obras, su convocatoria nacionalista es genuina y permanente. La filosofía del Samurai sigue vigente, de alguna manera las artes marciales retienen ese legado en parte. Almeyda cuando fue entrenador atribuyó su campeonato de las Chivas a la observancia de virtudes Samurai, el camino del guerrero, no termina y tiene aplicación en la vida moderna si se sabe adaptar y Almeyeda lo llevó al futbol.
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