Hoy mismo, miércoles 31 de julio hay dos caras de la moneda: la jefa de gobierno de la CDMX licitó y entregó a la ciudad las primeras 18 de 800 unidades que se pondrán en servicio, pero no subió tarifas porque el dinero que maneja es público, no es para robarlo en Mega transas porque así no alcanza. En Jalisco el gobernador Enrique Alfaro en plan mega recaudatorio elevó las tarifas empezando por el Macrobús y por el Tren Ligero, mantiene chatarra, si compra no concursa nada para darle el contrato a Dina de su padrino Raymundo Gómez Flores y además, sus policías no detienen delincuentes, sino que reprimen a los jóvenes.
Hoy miércoles 31 la jefa de Gobierno publicó en twitter: “Estamos contentos porque hoy presentamos las primeras 18 de 70 unidades nuevas de @RTP_CiudadDeMex. Tienen piso bajo (sic), cámaras (sic), controles automáticos (sic). Mañana se resuelve la segunda licitación para otras 118. En total serán 800 nuevas unidades de RTP. La tarifa se mantiene (sic) igual!!!”.
Bueno, en Jalisco vemos el lado opuesto de lo que es un servicio público. El gobernador no entiende que el dinero que maneja, poco o mucho es propiedad del pueblo. Que al pueblo se le regresan esos impuestos en beneficios. Uno de ellos es el del transporte público, servicio que siempre recibe subsidios, aquí y en China, o simplemente en Estados Unidos. Pero Enrique Alfaro no quiere subsidiar sino ganar y que el pueblo siga gastando.