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Iván García Medina
Lo que mal empieza mal acaba, dice el refrán popular y así ocurre en el ayuntamiento de Zapopan que preside el depredador de empresas e instituciones Pablo Lemus quien para evitar que el diputado federal que también llegó por Movimiento Ciudadano, Carlos Lomelí no denunciara su saqueo, le cedió el manejo absoluto del hospitalito y hoy lunes 15 de mayo Mural descubre en primera plana que la familia Lomelí se quedó con los principales contratos.
La nota dice: “El OPD Servicios de Salud Zapopan tenía entre sus proveedores predilectos a una empresa ligada al diputado federal, Carlos Lomelí Bolaños.
“Desde febrero de 2016 a la fecha, el organismo realizó 57 (sic) compras, al menos, al Grupo Quiropráctico del Bajío SA de CV, por un total de 1 millón 338 mil pesos, según facturas registradas ante el SAT y datos de transparencia.
“La venta de los productos las realizó Mario Vargas Lomelí, quien se identifica en diferentes oficios como gerente comercial y representante legal de Grupo Quiropráctico, que tiene oficinas en GDL y se constituyó en 2011 en León, Guanajuato.
“Vargas Lomelí es sobrino de Lomelí Bolaños y, de acuerdo al padrón de proveedores del Gobierno del Estado, con la clave P24722, también es representante legal de la empresa Abisalud, de la cual el diputado federal es socio fundador.
“En un perfil de Facebook, creado en 2013, aparece una persona de nombre Mario Vargas Lomelí, quien hizo una publicación que trabajó en Lomedic SA de CV, de la cual es dueño el diputado.
“El ex director del OPD, Alfredo Bautista, autorizó las operaciones por medio de compras fraccionadas, ya sea por adjudicación directa o invitación restringida, sin necesidad de ser aprobadas por el Comité de Adquisiciones, según lo faculta el Reglamento Interno.
“Entre las adquisiciones hay desde vendas, paracetamol, jeringas, jabón de uso quirúrgico, soluciones, termómetros, sondas, catéteres, electrodos, más fármacos y hasta pañales.
“El Grupo Quiropráctico del Bajío se habría llevado el 11 por ciento de los 11.5 millones de pesos que la institución destinó como partida para materiales, accesorios y suministros médicos, de acuerdo con su Presupuesto de Egresos 2017”
La nota de Mural es todo un recuento del atraco que sufre el Ayuntamiento de Zapopan, ahora en el Hospitalito. Cita también que el PRI ya había pedido ceses en la dependencia por malos manejos. Bueno, en la sucia administración de Pablo Lemus en Zapopan, crecen los saqueos y la vergüenza de Enrique Alfaro por tener un compañero alcalde tan corrupto.
Y falta.
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